Nova Ática
Estilo y funcionalidad, esas son las claves de nuestro proyecto para Nova Ática.
Sus instalaciones están pensadas para favorecer el trabajo en equipo y la colaboración. A través del uso de las mamparas conseguimos separar los espacios y crear entornos privados para sus empleados sin renunciar a una sensación de espacio diáfano.
Entender las necesidades cambiantes del entorno laboral es clave para crear espacios de trabajo eficientes, y es por eso que cuando Grupo Nova Ática nos planteó la necesidad de equilibrar la colaboración con la privacidad necesaria en sus espacios, nuestro equipo supo cómo captar la esencia del proyecto. Para Ática, la solución óptima serían las mamparas de oficina, un componente esencial para un entorno laboral moderno.
Las mamparas de oficina ofrecen numerosas ventajas. Primero, fomentan la transparencia y el flujo natural de luz, haciendo que el espacio se sienta más abierto y acogedor. Además, proporcionan cierto nivel de privacidad sin aislar por completo a los empleados, promoviendo así la colaboración. Por último, son una solución versátil y adaptable.
Las mamparas de oficina desempeñan un papel imprescindible en el bienestar laboral. Proporcionan un equilibrio ideal entre transparencia y privacidad, permitiendo la fluidez de la comunicación mientras protegen la concentración individual. Este equilibrio mejora la satisfacción y la productividad en el trabajo, porque cuando los empleados se sienten cómodos y valorados en un espacio bien pensado, su bienestar y motivación se elevan sustancialmente.
Minimalismo funcional
En el proyecto de Grupo Ática, la sala de reuniones se diseñó con un enfoque minimalista, donde cada elemento promovía un ambiente libre de distracciones. Apostamos por un confort lumínico y sensorial, garantizando la concentración.
Cada pieza de la sala, desde el mobiliario hasta la iluminación, fue escogida para complementar este enfoque, haciendo de la sala de reuniones un espacio que favorece la productividad y la toma de decisiones.