Aunque pueda resolver muchos problemas de espalda, de espacio y distribución, en Oficines sabemos que el mobiliario de oficina no es la única clave para desarrollar una empresa de éxito. A continuación, describimos 5 factores clave que deberás tener en cuenta si decides desarrollar una empresa por ti mismo.
1- Tener una buena idea
Es la primera, más básica y fundamental clave por la que debemos partir. Y resulta que suele ser el primer punto por donde solemos fallar. No basta con nuestra experiencia, conocimientos y perseverancia, necesitamos arrancar con una idea de negocio realizable, a la altura de nuestros conocimientos y sobre todo, que responda a las necesidades reales de nuestro Público Objetivo. ¿Tienes problemas para obtenerla? Sal ahí afuera y observa. Las mejores ideas parece que surjan de la nada, y eso no es cierto: vienen de una alta capacidad para observar el entorno y a las personas.
2- Crea una estrategia
Si ante la pregunta ¿Qué deseas conseguir con esto? tu única respuesta es “ganar mucho dinero” es que algo está fallando. Al margen de los beneficios, debes visualizar metas a largo plazo, que varían desde el área geográfica que quieres abarcar hasta la percepción que tendrán de ti tus futuros consumidores. Preguntas cómo ¿qué lugar tendré en el mercado dentro de 10 años? Pueden sentar las bases para comenzar un plan a largo plazo.
3- Pero cámbiala cuando sea necesario
Ensayo y error deben estar presentes en todo negocio. Nunca trazamos una idea o un plan estratégico totalmente perfecto, por ello tenemos de someter nuestra estrategia a cambios constantes.
Anotación: corregir tu estrategia de tu negocio puede influir negativamente en la percepción del consumidor sobre tu marca. Debes tener cuidado en no resultar incoherente en tu comunicación.
4- Mantente firme
Roma no se construyó en un día, y (nombre de tu empresa) tampoco. Deberás tener una alta tolerancia al fracaso y la frustración, y no rendirte ante baches que irán sucediendo en el día a día. También deberás aprender a diferenciar los obstáculos superables de aquellos que no lo son, recuerda que siempre puedes encontrarte con una dificultad que escapa al control que puedas tener de la situación.
5- Haz relaciones
La “contactología” o arte de establecer relaciones es muy importante a la hora de conseguir las metas de tu nuevo negocio. Posibles inversores, mentores, personas que cuentan con experiencia y se prestan a ayudarte a impulsar tu proyecto… el activo humano es uno de los factores que marcan la diferencia entre el éxito y el fracaso de tu nueva empresa.