Trabajar en una oficina durante 8 horas diarias, implica que en multitud de ocasiones debas comer en ella. Tener 1 hora para comer, implica que no dispongas de tiempo para poder ir a casa para ello, por lo que es imprescindible quedarse en la oficina para no perder tiempo. Generalmente, esta opción supone un caos, puesto que a veces no sabes qué prepararte para poder comer durante la semana. Sin embargo, para salvarte de dicha preocupación, hemos realizado una selección de las mejores recetas para que no te suponga un problema.
Comer sano con tupper es posible
Para poder comer en la oficina, debemos disponer en primer lugar de una nevera en la cocina del trabajo. Es importante, puesto que los alimentos deben almacenarse en ella para que no se estropeen. Asimismo, un microondas será imprescindible para no comérnosla fría. Una vez hecho esto, debemos tener tuppers, el mayor invento que se ha creado para hacernos la vida más sencilla. En ellos, tenemos la posibilidad de llevar todo lo que deseemos y no tiene por qué ser comida rápida que no sea muy saludable.
La pasta y el arroz, son los dos ingredientes más versátiles y que mejor se adaptan a las comidas de tupper. La razón, reside en que son ligeros y gracias a estos elementos principales, se pueden hacer varias recetas diferentes. En cuanto al arroz, es posible hacer “arroz a la cubana”, “arroz al horno” o “paella”. Para la pasta, puedes llevarte pasta a la carbonara, a la puttanesca o bien, ensalada completa de pasta.
Por otra parte, encontramos el pescado y la carne acompañado de verduras como guarnición. De este modo, es posible obtener todos los nutrientes de los alimentos y a la vez, comer variado. Dentro de este tipo de comidas, podemos hacer revuelto de ajetes tiernos con carne o pescado, pescado en salsa verde o pollo al horno con patatas.
Además de ellas, podemos hacer sepia a la plancha con judías o guisantes, judías verdes con una lata de anchoas o sardinas o una ensalada de pasta compuesta por gulas, jamón e ingredientes básicos de la ensalada.
Para quienes no sean muy cocineros o cocineras, siempre pueden apostar por las ensaladas. En este ámbito, sí que existe una extensa diversidad por la cantidad de elementos que admiten. Pueden añadirse verduras, queso, salmón, fruta, pechuga de pollo hervida o surimi, entre otros.
Por otro lado, siempre tenemos la opción de renunciar al tupper y pedir comida a domicilio. En este sentido, el sushi es el plato estrella, pero también encontramos la comida tailandesa o china que nos puede salvar del apuro.
Comer en la oficina puede dejar de ser monótono si apuestas por cocinar platos diferentes. Ponte el delantal, coge tus utensilios de cocina y un libro de recetas para ponerte a cocinar tu comida en la oficina. Estamos seguros de que tus compañeros te proclamarán como el foodie de la oficina y les contagiarás este amor por la cocina sana.